Diamantes reciclados VS diamantes de laboratorio

Es posible que haya escuchado varias afirmaciones sobre los diamantes cultivados en laboratorio. Pero, ¿qué significan realmente en términos de impacto medioambiental, coste y valor de reventa? Aquí están los pros y los contras de los diamantes reciclados y cultivados en laboratorio, y las respuestas a esas preguntas.

¿Qué son los diamantes creados en laboratorio?

También llamados diamantes sintéticos o diamantes de síntesis, son diamantes creados en un laboratorio. Hay varios tipos de diamantes sintéticos, como la zirconia cúbica, el polímero acrílico, el cristal y la pedrería. También hay minerales que imitan a los diamantes, como el cuarzo y la moissanita.

Los "diamantes producidos en laboratorio" hacen referencia a una serie de procesos que se vienen utilizando desde mediados del siglo XX y cuyo uso en joyería ha aumentado en la última década. Hay dos métodos para producir diamantes cultivados en laboratorio: alta presión y alta temperatura (HPHT) y deposición química de vapor (CVD).

Ambos métodos producen diamantes que tienen la misma estructura química que los diamantes naturales. Estos hermosos diamantes no se asocian con el conflicto, pero no son ni raros ni valiosos. Todos los días se fabrican muchos diamantes y, al igual que muchos productos fabricados en serie, son baratos.

Breve inciso en la moissanita

A primera vista, las gemas de moissanita se parecen a los diamantes. Sin embargo, hay diferencias entre la moissanita y los diamantes en cuanto a su composición y a la forma en que reflejan la luz.

La moissanita fue descubierta a finales del siglo XIX por el científico francés Henri Moissan cuando descubrió partículas microscópicas de la gema en el cráter de un meteorito. Al principio, Moissan creyó que se trataba de diamantes, pero después de investigar más a fondo estableció que estaban compuestos por una sustancia llamada carburo de silicio. Debido a la rareza de la piedra natural, la inmensa mayoría de la moissanita se fabrica en laboratorio.

En términos de durabilidad, la moissanita se comporta bastante bien en comparación con el diamante, que es la piedra más duradera del mundo. Mientras que los diamantes alcanzan un perfecto 10 en la escala de dureza de Mohs, las moissanitas obtienen un respetable 9,25.

Una de las principales diferencias entre la moissanita y los diamantes es que las piedras de moissanita reflejan la luz de forma diferente a los diamantes. Debido a sus facetas, las gemas de moissanita crean destellos de luz que tienen un efecto de arco iris, mientras que los diamantes producen tres tipos de luz: brillo, dispersión y centelleo.

¿Qué son los diamantes reciclados?

Los diamantes reciclados son, simplemente, diamantes naturales usados. Algunas llevan cientos de años en la cadena de suministro, mientras que otras se compraron y vendieron hace sólo unos años.

Debido a su rareza y a su coste, un alto porcentaje de los diamantes se reciclan, independientemente de dónde se hayan comprado. Sin embargo, también se reforman y, a veces, se recortan para adaptarse a la evolución de los gustos joyeros. Los diamantes, por su propia naturaleza, son muy antiguos. Por tanto, el concepto de "diamante nuevo" sólo puede significar un "diamante recién extraído". Y un diamante usado moderno debería tener el mismo aspecto que un diamante "recién extraído".

Pros y contras de estos diamantes

• Coste: Cuando se trata de comprar diamantes reciclados, son considerablemente más baratos que los diamantes normales. Especialmente cuando se trata de comprar joyas de diseño de segunda mano de marcas como Bvlgari, Cartier, Chopard, Harry Winston, Tiffany & Co. y Veragio. Además, cuando se trata de vender diamantes reciclados, éstos conservan muy bien su valor.
  
  Por otro lado, los diamantes creados en laboratorio suelen ser un 30% más baratos que los naturales que se venden en las joyerías. Sin embargo, suelen ser más caros que los productos reciclados y no tienen el mismo valor de reventa.
  
  Cómo se comparan. Los diamantes reciclados son más valiosos y más asequibles.
  
• Impacto ambiental: Algunos proveedores llaman a los diamantes reciclados "diamantes sostenibles" porque no tienen impacto en la sociedad y el medio ambiente. Como no se extraen, sino que simplemente se revenden, no tienen ningún impacto negativo sobre la tierra o la atmósfera.
  
  Los diamantes cultivados en laboratorio, por el contrario, se producen mediante alta presión y alta temperatura (HPHT) o deposición química de vapor (CVD), que se llevan a cabo en grandes fábricas y no en pequeños laboratorios. Ambos consumen también enormes cantidades de energía. Según un experto, la energía necesaria para producir un quilate de diamante de laboratorio es la misma que se necesita para alimentar un hogar estadounidense medio durante 8,7 días o para cargar un Tesla 2,5 veces.
  
  Pero incluso dentro de la industria del diamante cultivado en laboratorio, las cifras varían mucho, al igual que las fuentes de energía.
  
  La mayoría de los diamantes cultivados en laboratorio se producen en regiones donde la energía renovable es relativamente escasa. En China, donde se suelen producir diamantes HPHT, más de la mitad de la energía procede del carbón. En India, el porcentaje de energía procedente del carbón es aún mayor.
  
• Apariencia e imperfecciones: Al igual que los diamantes "nuevos" que se compran en la joyería, los diamantes reciclados se clasifican según las cuatro C (talla, color, claridad y peso en quilates). Hay muchas organizaciones que califican los diamantes, pero el estándar de oro en la industria es el Instituto Gemológico de América.
  
  Contrariamente a la creencia popular, los diamantes producidos en un laboratorio no son automáticamente impecables. El proceso de laboratorio imita la formación de un diamante natural y, por tanto, puede ser defectuoso.
  
  El GIA, que lleva informando sobre los diamantes cultivados en laboratorio desde 2007, los juzga basándose en las mismas cuatro C que los diamantes reciclados, y el informe indica que son cultivados en laboratorio y cómo se crearon.
  
• Precio de reventa: El valor de reventa es una de las principales diferencias entre un diamante reciclado y un diamante cultivado en laboratorio. Los diamantes reciclados pueden conservar un mayor porcentaje de su coste original si se venden a un precio justo en su tienda original. Las excepciones son los diamantes que a menudo están astillados y/o son muy antiguos y necesitan ser recortados para tener la simetría necesaria para atraer a los compradores modernos.
  
  Por otra parte, el mercado secundario de los diamantes producidos en laboratorio es escaso o inexistente. Además, a medida que aumenta la producción de diamantes cultivados en laboratorio, el precio tiende a bajar en lugar de subir.

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