Metales hipoalergénicos en joyería

Es importante conocer los metales hipoalergénicos si tienes algún tipo de alergia. Las alergias pueden adoptar diferentes formas. Algunas personas sólo son alérgicas al níquel, mientras que otras son alérgicas al cobre, y otras pueden ser alérgicas a cualquier metal no puro. Las alergias a los metales suelen manifestarse en forma de picores en la piel, sarpullidos e incluso ampollas.

En el caso de los metales menos puros y de las alergias menores, el metal ofensivo puede simplemente manchar la piel de un color verde o gris oscuro. Muchas personas que padecen alergias a los metales pueden poner fin a sus síntomas cambiando a un metal más puro, en lugar de una aleación. El oro de 24 quilates, la plata de ley y el acero inoxidable se suelen considerar metales hipoalergénicos. Veamos estas y otras opciones de componentes de joyería hipoalergénicos.

El metal hipoalergénico de moda, el niobio

El niobio es un metal que se utiliza con frecuencia en los implantes médicos, similar al titanio, y es excelente para las alergias a los metales. Nunca se pinta ni se chapotea, el color se adhiere al metal anodizándolo en un baño eléctrico. No tiene aditivos, como níquel o plomo, por lo que es seguro para las personas con alergias a los metales. Los colores pueden ser azules y amarillos brillantes, o tonos más naturales de gris, negro y cobre.

Acero inoxidable

El acero inoxidable suele estar hecho de una aleación que incluye acero, cromo y, a menudo, níquel. A veces, el contenido de níquel es demasiado alto para que las personas alérgicas al níquel puedan usarlo de forma sistemática, aunque hay diferentes grados con mayor y menor contenido de carbono y níquel.

El acero inoxidable se utiliza en instrumentos quirúrgicos, lo que significa que es resistente a los corrosivos y no se oxida con el tiempo. Si busca la mejor aleación de acero inoxidable por sus propiedades hipoalergénicas, busque el acero XC45 o el inoxidable 430: tienen menos del 1% de níquel, mientras que el inoxidable 304 tiene más del 10%.

Plata

Puede resultar sorprendente, pero la plata de ley es en realidad una aleación. Tiene al menos un 92,5% de plata, por lo que la mayoría de las piezas de plata de ley llevan la marca 925. El otro 7,5% suele ser cobre, aunque también puede ser níquel. La plata se empaña con facilidad, por lo que a menudo se recubre de rodio para mantener su bonito brillo. Para la mayoría de las alergias a los metales, la plata de ley puede ser una gran opción.

Las piezas de joyería de plata se suelen encontrar chapadas en plata o rellenas de plata. En este caso, la plata de ley se aplica mediante un tratamiento térmico a un metal menos caro, como el latón. La plata acabará desapareciendo, dependiendo de la cantidad de plata. Para las personas con alergias menos graves a los metales, ésta puede ser una gran opción durante muchos años hasta que la plata se desgaste.

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